
El gobierno chino detendrá todos los proyectos que puedan contaminar el agua de los distritos de cinco ciudades chinas, según ha informado a los medios asiáticos el Ministerio de Protección de Medio Ambiente de China.
Siping, Hefei, Liu’an Kunming, Enshi Tujia y Miao son las ciudades culpables por no cumplir con los estándares del plan de control de la calidad del agua publicado en 2012.
El Ministerio ha tomado la medida tras analizar la implementación del control de la calidad del agua de los ríos Yangtze y Amarillo y ver que la situación es grave.

El gobierno chino invertirá entre 2011 y 2015 unos 60.000 millones de euros (500.000 millones de yuanes) en prevenir y controlar la contaminación de las aguas de las mayores cuencas hidrográficas. Esto supone 24.000 millones de euros más que el destinado en quinquenio anterior.
La meta del gobierno es que para finales de 2015, el 60 por ciento del agua de los ríos y los lagos del país debe ser potable.